viernes, 24 de octubre de 2008

BANQUETE

En medio de aquella función llegó la nave espacial; se apoderó del teatro, adormeció a los asistentes con gas, implantaron minúsculos artefactos de microondas en sus páncreas y se fueron. La gente despertó, preguntaron qué había pasado y entonces salieron. Una vez en la calle, comenzaron a subirse a sus autos y taxis, y entonces ocurrió. El aparato implantado en sus cuerpos fue activado desde la nave espacial y la gente comenzó a deshidratarse. Los líquidos dentro de las células hierven escapan. La gente cae, se hinca, el vapor sale por los poros y los vellos se queman. La piel comienza a confitarse, la grasa se derrite, los músculos se repliegan reducen estallan los ojos, se caen el pelo y las uñas, una extraña y densa sustancia sale por la boca el ano los oídos; los cuerpos se secan retuercen y envueltos en vapor, se cocinan. Al final, queda la calle repleta de cuerpos con la carne suave y jugosa, la piel crujiente y dulce. Escuche: ya se acercan. Festín de perros.

1 comentario:

Unknown dijo...

Si, yo estuve ahi, fue desastroso, un perro se llevo mi hombria, imaginate lo que es mi vida, ire al show Boomerang a hablar de ello, simplemente horrorifico!